Comienza la liga, comienza el fútbol y esas tardes de domingo junto al transistor, la televisión o la red. Comienzan nuevos proyectos y nuevas aspiraciones, nuevos objetivos, nuevas ilusiones. Con todo esto, comienza CONTEXTO FÚTBOL. Se cierra el mercado de fichajes y ya todas las plantillas están cerradas para encarar una nueva temporada después de jugar el primer partido oficial del campeonato doméstico.Se pueden resaltar dos cosas. El Barça sigue igual que siempre, con su juego preciosista, brillante, efectivo y arrollador. El Madrid no cambia, con su juego apático, sin un cometido claro, viviendo de individualidades, pero con mucha pegada. Hasta dieciséis tiros se contabilizaron ante el Mallorca, donde un Aouate inspirado le amargó el debut a José Mourinho. Un José Mourinho que ya parece que siente la presión de la afición blanca en el cogote, aunque no le asusta. Pienso que es algo equívoco por parte de la afición y la prensa de reprochar cosas a este Madrid aún en fase de construcción.
Éste Real Madrid crecerá con el paso de los partidos, estoy seguro, a medida que los jugadores se vayan conociendo y vayan trabajando juntos. Recordad que en las últimas dos temporadas se han incorporado catorce jugadores a la plantilla blanca, por lo que se puede considerar un equipo nuevo y por hacer. Tiene mimbres y recursos suficientes para hacer un gran equipo para mucho tiempo, veremos que hace el bueno de José, al que analizaremos en próximos artículos.
Por otra parte, y bajo mi juicio, nace un nuevo aspirante. Un equipo que apuesta por el buen fútbol, que tiene jugadores para hacerlo y que sobretodo, se están inculcando el gen ganador con el paso de esta última temporada, recordando viejos tiempos. Éste no es otro que el Atlético de Madrid. Un equipo con talento, con muchas cosas buenas y otras por pulir, y con un comandante que sabe lo que quiere, y como hacerlo. Quique Sánchez Flores rescató a un Atlético hundido la temporada pasada, y que reflotó llevándolo a la consecución de un título, a las puertas de otro y recientemente coronándose supercampeón de europa ante todo un Inter de Milán. Más allá de todo esto, pienso que éste es el verdadero año de este Atlético y que lo de la pasada temporada era la antesala a una época pintada con tintes de campeón cerca del Manzanares. Ya no sólo por esa dupla de genios como punta de lanza, sino con el resurgimiento de los De Gea o Domínguez o el rescate de grandes jugadores como Reyes y Ujfalusi. Parafraseando al maestro Sabina, “Qué manera de jugar”.
Aunque si tuviera que apostar por un equipo tapado para esta temporada, ése sería el Valencia. Tras perder a los que presumiblemente eran sus dos jugadores franquicia, se han sabido recomponer con mucho sentido común, con contrataciones acertadísimas en la teórica y que podrán aportar muchísimas cosas a este equipo. Sobre todo, de mediocampo en adelante. Y es que imaginar un mediocampo con Topal, Banega y Tino Costa lo dice todo. Los tres se complementan el uno al otro, y si llegan a entenderse podrán destapar el tarro de las esencias de Mestalla junto a un Mata campeón del mundo que ahora tendrá que recoger galones. Una mezcla de trabajo, sacrificio, magia, talento y saber hacer. Éste Valencia es de Champions.
Hagan sus apuestas, el balón ya rueda y éste será el único juez. Bienvenidos a Contexto fútbol.
¡Muy bueno! Y eso que sólo es el comienzo... Espero poder leerte con asiduidad.
Saludos y muchos ánimos!
Muy de acuerdo contigo en lo que dices de Valencia y Atlético. El Atlético lleva unos años que parece que va a ser su año y al final no hace nada, pero este de verdad puede ser su año, ya ha demostrado en Europa su poderío, ahora le queda la liga. Y el Valencia parece que es capaz de aguantar sin dos de sus pilares.
Felicidades por el blog, ¡Gran estreno!